Por Rodrigo Rivadeneira, asesor de almendros de Trinuts.
Este mes de diciembre debemos fijarnos en revisar nuestro huertos en cuánto al llenado de fruta. Si bien el calibre ya lo definimos en octubre, hoy día es el momento clave de terminar de llenar esa fruta y evitar que esté “chupada” por falta de riego y nutrición. Trabajar en ambas herramientas será esencial este período.
Queremos que sea una fruta que dé el calibre o se clasifique en tal calibre y no tener una fruta liviana, porque muchas veces las plantas de proceso las clasifican (diámetro), y después ese diámetro no da en el control de calidad, por lo que se procede a bajar los calibres de categoría.
La carrera está corrida, nos quedan los últimos cien metros y eso va a depender hoy en día a partir del peso de la pepa.
Esta fruta tiene que procesar, tiene que juntar carbohidratos, aceite y proteínas que es lo que no dará el peso finalmente.
Llenada nuestra fruta, terminando el proceso de maduración vamos a tener que estar preparados y orientarnos a la inducción floral y a armar nuestra estrategia de fertilización post cosecha.