Durante el 2023 el Instituto de Investigación Agropecuarias (INIA) logró retomar e implementar diferentes convenios y proyectos internacionales, enfocados en temáticas como bioinsumos y biocontroladores, agricultura digital, suelo y riego, entre otros.
Los avances en tecnología no sólo han permitido que se desarrollen proyectos a nivel nacional, sino que también en términos internacionales. En menos de un año, el área de Cooperación Internacional de INIA Chile ha firmado y ha reactivado más de 20 proyectos y convenios con países de Latinoamérica y el Caribe, Norteamérica, Europa, África y Asia, de los cuales siete acuerdos marcos entraron en vigencia antes de diciembre de 2023, con China, Túnez, Bélgica, España, Cuba y Perú.
Entre los proyectos y convenios que se concretaron destacan iniciativas de investigación, capacitaciones, consultorías, pasantías y participaciones en foros internacionales. La encargada de Cooperación Internacional de INIA, Dra. María Teresa Pino, explicó la importancia de la institución en el área, porque contribuye en diferentes dimensiones de la internacionalización de la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) que realiza el INIA, permitiendo la colaboración entre países en los que Chile puede hacer un aporte, así como formar y atraer capacidades de otros países hacia el territorio.
“En INIA recibimos constantemente a pasantes para capacitarse en temas de biotecnología, postcosecha, gases de efecto invernadero en la agricultura, incluso en 2023 tuvimos un pasante en cooperación internacional, ya que somos una institución referente en esas áreas dentro de los institutos INIA de Latinoamérica y el Caribe. Por ello, el intercambio no sólo se limitó a la investigación y desarrollo, sino que hemos atendido sus demandas en gestión de la investigación y en la evaluación de impacto, gestión de personas y propiedad intelectual, entre otros”, añadió.
Por otra parte, debido a la alta oferta y demanda de intercambio internacional, “hemos establecido procedimientos claros para estandarizar, facilitar y transparentar estos procesos internacionales, que implica traída de pasantes, salidas de nuestro personal, o postulación a proyectos internacionales”, agregó María Teresa Pino.
En el año 2023, la Climate Food and Farming Global Research Alliance Scholarships (CLIFF-GRADS) y otras fuentes financiaron pasantías hasta de un semestre de doctores de universidades extranjeras (Nigeria, Argentina, Florida EE.UU., y otros) para que se capacitaran en INIA Chile en producción animal y medioambiente. Además, el instituto recibió tesistas y pasantías cortas de estudiantes y profesionales de Francia, España, Suiza, Panamá en biotecnología, vides, cambio climático y otros.
Algunas experiencias destacadas fue la capacitación en gestión de la innovación, que se realizó en formato híbrido (presencial + online) para el ICTA de Guatemala, considerando áreas como la evaluación de impacto y planificación de proyectos agropecuarios. Asimismo, una actividad de cooperación similar se ejecutó con el IDIAP en Panamá, instancia en que un equipo de profesionales de vinculación y transferencia tecnológica de INIA, fueron capacitadores internacionales a través de la OTEC institucional INIAeduca.
Capacidades técnicas reconocidas
En la actualidad, el Programa Cooperativo para el Desarrollo Tecnológico Agroalimentario y Agroindustrial del Cono Sur (PROCISUR), reconoce a INIA Chile como una institución de investigación líder y que se está modernizando. Este tipo de reconocimientos permiten que hoy el instituto forme parte de grupos de trabajo y esté liderando la presidencia de la Red Iberoamericana de Digitalización de la Agricultura y la Ganadería (RIDAG), integrada por instituciones como el IRTA de España, INTA de Argentina e INIA Uruguay, entre otras.
Al mando de la RIDAG y la investigación y desarrollo en agricultura digital, INIA se propuso ser una de las entidades validadoras de nuevas tecnologías, es decir, decidir cuáles innovaciones que ofrece el mercado son las más idóneas para cada región del país, y para cada tipo de agricultor. La Dra. Pino explicó al respecto que “traer la tecnología a Chile es importante para llevar la agricultura digital al campo, pero también a los jóvenes que son los que realmente hacen el cambio. Se aprobó un proyecto de transformación digital en el agro del Cono Sur para la gestión eficiente del agua, mediante el fortalecimiento de los INIA y financiado por PROCISUR y el IICA. Además, el año pasado ganamos otros varios proyectos internacionales importantes que hoy en día se encuentran en etapa de inicio”.
Algunas de esas iniciativas son los proyectos internacionales titulados “Optimizando el uso de nitrógeno, mayor producción y menor impacto (N4R)”, y el proyecto “Hacia una ganadería climáticamente inteligente en comunidades Mapuches de Argentina y Chile”, ambos financiado por FONTAGRO y Nueva Zelanda. Además, INIA se adjudicó capitales semillas FONTAGRO para el levantamiento de nuevos estudios de gran envergadura, como la iniciativa “GEF Towards Sustainable Phosphorus Cycles in Lake Catchments (uP-Cycle), liderado por el Dr. Jaime Mejías, de INIA Carillanca (Región de La Araucanía).
Durante el año anterior, cerca de 200 profesionales y ayudantes de investigación participaron en congresos, foros internacionales y capacitaciones realizadas en diferentes continentes, equivalente a un costo de $250 millones, en parte financiados por los organismos organizadores de cada evento.
Para el 2024, INIA Chile espera seguir colaborando y apoyando en distintos temas de gran interés para el sector productivo regional e iberoamericano, como el cambio climático, bioinsumos y biofertilidad; suelo y agricultura regenerativa; agricultura digital, y otros. Además, de colaborar con el PROCISUR y FONTAGRO, la institución seguirá trabajando con la Global Research Alliance (GRA), instancia de participación intergubernamental liderada por Nueva Zelanda para la mitigación de gases contaminantes en la ganadería, así como también en foros internacionales como la APEC y AIM.
Fuente: Comunicado de Prensa INIA