Conversamos con Carlos Muñoz, director comercial de IDESC Group quién nos contó sobre la amplia experiencia de la empresa en el país.

La agroindustria chilena demanda soluciones técnicas avanzadas y personalizadas para garantizar el éxito de los cultivos en un mercado competitivo. IDESC Group, con una sólida trayectoria en proyectos agrícolas, ha desarrollado un enfoque integral que combina tecnología de vanguardia, maquinaria de alto rendimiento y una relación estrecha con sus clientes para marcar la diferencia.

Enfocados en la preparación de terrenos para plantaciones de viñas, almendros, cerezos y avellanos europeos, IDESC utiliza maquinaria especializada como bulldozers D8 y D9, junto a excavadoras de 30 toneladas. Este equipamiento asegura un trabajo preciso y eficiente. Además, como un valor agregado, ofrecen a sus clientes grabaciones con drones que documentan el “antes y después” de cada proyecto, brindando transparencia y confianza en los resultados.

IDESC se distingue por respetar las indicaciones de los asesores y clientes, sumando su experiencia en miles de hectáreas trabajadas para obtener mejores resultados. Este enfoque colaborativo permite diseñar soluciones adaptadas a cada proyecto, maximizando la productividad y optimizando recursos.

¿Cuáles son los principales servicios que ofrece IDESC Group para la agroindustria y cómo se diferencian en el mercado?
C.M: Una de nuestras áreas de negocio se enfoca en el sector agrícola. Estamos orientados a la preparación de suelos para plantaciones de diversos cultivos, como viñas, almendros, cerezos y avellanos europeos, entre otros. Realizamos estos trabajos con bulldozers tipo D8/D9, complementados con excavadoras de 30 toneladas. Además, ofrecemos servicios de destronque y construcción de acumuladores de agua.
La clave de este negocio radica en cumplir con los tiempos de los proyectos de nuestros clientes, para lo cual contamos con maquinaria del año 2019 en adelante. Como valor agregado, entregamos una grabación con dron que muestra el “antes y después” del trabajo realizado. Nuestra experiencia y el trabajo conjunto con el cliente generan una relación de “ganar-ganar”.

¿Qué tipo de soluciones personalizadas ofrecen a sus clientes en el sector agrícola, especialmente en términos de preparación y gestión de terrenos?
C.M: Siempre respetamos las indicaciones del cliente o asesor, combinándolas con nuestra experiencia para abordar los proyectos y lograr mejores resultados.

¿Cómo han integrado su experiencia técnica en la ejecución de proyectos como subsolados, garreo y construcción de camellones para optimizar la productividad agrícola?
C.M: La clave está en la maquinaria, que debe ofrecer disponibilidad física (mecánica) constante. Sin embargo, lo que más valoramos es el recurso humano. Contamos con operadores altamente experimentados en los distintos procesos constructivos. Esta experiencia, acumulada en miles de hectáreas trabajadas, es nuestra principal fortaleza.

¿Qué papel juega la maquinaria pesada en la eficiencia de sus operaciones agrícolas, y cómo seleccionan y mantienen estos equipos?
C.M: Complementando, seguimos estrictamente las pautas de mantenimiento del fabricante y monitoreamos los equipos a través del sistema satelital Komtrax, lo que nos permite tener la operación controlada en línea.

¿Cuáles son las principales líneas de trabajo de IDESC en el sector agrícola y cómo se distribuye su cartera de proyectos entre estas áreas?
C.M: Como mencioné, esta es un área que evaluamos y proyectamos año a año, dependiendo de la actividad y de los proyectos que nuestros clientes deseen desarrollar. Planificamos nuestras operaciones de acuerdo con sus requerimientos para ejecutar los trabajos dentro de los plazos propuestos. Nuestro principal objetivo es cumplir y exceder sus expectativas.

¿Qué innovaciones o tecnologías han implementado para mejorar la sostenibilidad y eficiencia de sus proyectos agrícolas?
C.M: Nos hemos asociado con fabricantes de maquinaria que nos proporcionan el soporte necesario para garantizar disponibilidad operacional. Además, trabajamos exclusivamente con equipos de menos de cuatro años de antigüedad. Por ejemplo, los bulldozers son equipos complejos de conseguir, pero aseguramos que mantengan una disponibilidad mecánica superior al 90%.

¿Qué tipo de clientes suelen trabajar con ustedes en la agroindustria y qué tipo de proyectos consideran los más desafiantes?
C.M: Trabajamos principalmente con grandes actores de los sectores vitivinícola y frutícola. Estos clientes invierten en la preparación de suelos, desarrollando proyectos que van desde 5 hasta 300 hectáreas. Nuestra área de operación abarca desde la Región de Coquimbo (IV) hasta la Región de Los Lagos (X).

¿Cómo gestionan el equilibrio entre el cuidado del medio ambiente y las necesidades operativas de sus proyectos agrícolas?
C.M: Nuestras máquinas, al tener menos de cuatro años de antigüedad, cumplen con las normas de emisión de gases. Adicionalmente, reciclamos todos los aceites, filtros y baterías que utilizamos, reafirmando nuestro compromiso con el medio ambiente.

¿Qué proyecciones o planes de crecimiento tienen para expandir sus servicios dentro de la agroindustria?
C.M: Nuestra expansión depende del crecimiento de la industria. A medida que esta avanza, nosotros también crecemos. Este es un proceso colaborativo, y aquí valoramos cualquier apoyo que podamos recibir para potenciar nuestras proyecciones futuras.

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